sábado, 31 de enero de 2009

1983 - Estación Victoria

En 1982, después de la sonada y lamentable disolución de Los Modelos, uno de los principales y más prometedores grupos de la nueva ola madrileña de los primeros 80, Casilda Fernández y Guillermo Pérez de Diego, vocalista y guitarrista respectivamente de aquella formación, decidieron unirse a Francis Muñoz (un teclista que ya había colaborado en alguna ocasión con aquel grupo) para formar una nueva banda de pop electrónico, Estación Victoria.


Los parámetros del nuevo trío se alejaban mucho del pop melódico y melancólico que caracterizaba a Los Modelos, siendo un híbrido de influencias que abarcaban desde Japan a Culture Club, pasando por los productos más típicos del tecno-pop británico: The Human League, los momentos más pop de OMD, etcétera.

Estación Victoria saltó al panorama musical en 1983 con un sencillo editado por MR (el nuevo sello independiente de Paco Martín que se había estrenado con Pistones) que incluía los temas 'Contacto en Saigón' y 'Colonias'. El disco estaba bien grabado y rezumaba arreglos de percusión electrónica, sonidos Prophet y efectos y pegajosas melodías efectuadas con un Korg MS-20, el sintetizador monofónico de moda en aquel momento (los valencianos Betty Troupe incluso llegaron a dedicarle una canción).

Aquel primer trabajo, a pesar de contar con una pobre distribución, se vendió bien en los ambientes musicales independientes, llegando a sonar incluso en las emisoras comerciales, pero, muy pronto, un oyente avispado llamó a Radio 3 y conminó a los locutores a comparar 'Contacto en Saigón' con el 'Canton' de Japan. Lo cierto es que las melodías de ambos temas eran idénticas, pero Francis Muñoz, autor de la canción de Estación Victoria, lo achacó entonces a una "simple coincidencia", debido a que, al parecer, ambos temas estaban basados en un antiquísimo himno chino.

El caso es que la prensa musical se fijo en el grupo y MR, con el apoyo de la multinacional Ariola decidió apostar por más trabajos del trío madrileño. De este modo, el sello de Paco Martín les convirtió en uno de sus grupos estandarte, e incluyo temas nuevos del grupo 'Octubre Rojo', 'Galeón Español' en un recopilatorio de presentación de la cartera musical de su discográfica.

Por esa misma época Casilda, la vocalista, abandona la banda, siendo sustituida por Jenny Rodríguez, una joven cantante de buena voz y atractiva planta, aunque menos preparada para las tablas que su predecesora, que además era dueña de una de las voces más dulces del pop español de aquellos años.

En 1984, la nueva formación de Estación Victoria ve editado su primer álbum, un trabajo que incluye 10 temas de los cuales tres ya habían sido publicados por MR en otros formatos. Canciones como 'Hollywood', 'Fashion', 'París' o 'Sol en Venus' redundan en los terrenos ya investigados por el grupo con anterioridad, y tienen un aire intrascendente que se intenta suplir con constantes referencias estéticas, tanto a la vida cosmopolita como a todo tipo de épocas imperiales. Más tarde, tras una serie de conciertos por varios puntos de la geografía española el grupo se disolvió, al parecer debido por el miedo escénico que se apoderaba de su cantante en los directos.

Durante su corta trayectoria Estación Victoria contó siempre con el apoyo musical de dos excomponentes de Mamá, otro grandísimo combo de la nueva ola española. Así, Carlos Rodríguez se encargaría de tocar el bajo y de producir las grabaciones del grupo, mientras que Guti haría los propio con la batería y percusión electrónica.

Redacción NO80s
(Aportaciones: Pablo M. Vaquero)

viernes, 30 de enero de 2009

1981 - Tomates Electricos


Efímera pero fundamental se podría decir que fue la apuesta de Tomates Eléctricos en la escena tecno valenciana, ya que este grupo abanderó toda la esencia de los sintetizadores, cajas de ritmo y demás sonidos polifónicos de una ciudad que sucumbía ante los ecos del rock progresivo, los retales que llegaban a cuentagotas de la new wave y sobre todo por el rock mediterráneo, que por entonces daba sus últimas bocanadas en una Valencia que quería modernizarse cuanto antes. Los cuatro responsables de aquel bonito y poco habitual injerto tecno-naranjero respondían a: Miguel Ángel Galán “Tomator” (secuenciador, sintetizadores y coros), Francisco Galán “Tomatín” (guitarra eléctrica y coros), José Godofredo “Kokof” (voz y percusión electrónica) y José Luis Macías (sintetizadores).

Aquella creatividad, tanto musical como visual, tan solo se reflejó un año, 1981, y únicamente se pudieron ver en directo en un par de ocasiones, ambas en una de las salas que más apoyó a los grupos locales de la zona, Planta Baja. La primera de ellas se sucedió nada más entrar en otoño. En el pequeño local no se daba crédito a lo que sonaba por los altavoces en esos momentos, algo parecido al ‘Fade To Grey’ de Visage, y eso en un lugar público de esas características desde luego que resultaba poco habitual. La imagen del cuarteto, inclasificable por entonces, enmudecía a los asistentes, solo había

un músico con una guitarra acompañado de tres enloquecidos “tipos” que se movían frenéticamente delante de extraños aparatos. Los individuos, de pelo corto, iban vestidos con pantalones y camisas con corbata, más otro, Kokof, poseía una camiseta de plástico de colores, al mismo tiempo que tocaba extraños botones sin parar y no cesaba de moverse, agitándose como un poseído delante de unos paneles de control repletos de botoncitos y lucecitas destellantes y demás aparatos, cables y racks de efectos. El sonido era limpio, rítmico, extraño y endiabladamente ensordecedor, parecía transportarte directamente a Frankfurt delante de los mismísimos Kraftwerk. Después de esa noche eran comprensible muchas cosas que decían otros chavales en sus canciones, como el futuro ya está aquí (Radio Futura) o los tiempos están cambiando (Loquillo y Trogloditas), aunque este último plagiaba en su letra a un tal Bob Dylan, que ya antes, en otro sitio y en inglés, dio cuenta de tal dichoso significado.

La otra actuación fue ya a finales del mismo año, con un sonido calcado y una imagen, aun si cabe bastante más futurista, desprendiendo de su originalidad piezas que respondían a títulos como ‘Climax’, ‘No Te Pongas Histérico, Querido’, ‘Orgía De Los Selenitas’ o ‘Teléfono Rojo’, su canción más representativa. Uno de los teclistas, José Luis Macías, de pelo rubio a lo David Sylvian, líder por entonces éste de una de sus bandas fetiche, Japan, había parido una canción llamada ‘Imágenes’, claro está, con mucho sintetizador de por medio. Aquel tema no gustó al resto del grupo y se la llevó a Glamour, banda la cual por

entonces militaba y estaba empezando a gestar su primer álbum, convirtiéndose a medio plazo en uno de los himnos de La Movida Valenciana, amén de que Glamour ha sido y es el referente musical más importante de toda la historia de la música nacional surgida por tierras valencianas. ¿Qué habría pasado si ‘Imágenes’ hubiera calado en Tomates Eléctricos?.

Tras este último concierto finalizó la historia de Tomates Eléctricos, dejando para la posteridad una gloriosa y cotizada maqueta grabada analógicamente en el Tomakay, y donde se reflejaban aparte de los temas nombrados anteriormente: ‘Viajes’, ‘Caminos Intermitentes’, ‘Visitantes De Grecia’, ‘Billy Luce Muy Lindo’ y ‘Mente En Blanco’. A nivel póstumo, dicha maqueta fue “editada” por Juan Vitoria para su tienda de discos Ámsterdam. También se grabaron y masterizaron cuatro temas años después para un extended play que desgraciadamente nunca vio la luz: ‘Teléfono Rojo’, ‘Viajes’, ‘Caminos Intermitentes’ y ‘La Orgía De Los Selenitas’.

A principios de 1982 y tras asentarse José Luis Macías en Glamour, los tres músicos restantes empezaron a dar vida a Fanzine, reclutando a Vicente Comes “Paloma” y Luis “Susu” Pisu, y emergiendo con ellos una de las formaciones más memorables que conoció Valencia por aquella década de los ochenta, aunque con un final idéntico que los mismos Tomates Eléctricos. Como nota anecdótica, años después, una banda local llamada Última Emoción, en donde recalaba el mismo José Luis Macías y colaboraba esporádicamente José Godofredo “Kokof”, titularon a uno de sus temas ‘El Misterio De Los Tomates Eléctricos’, en un claro homenaje al cuarteto valenciano.

http://www.movidavalenciana.com/

miércoles, 28 de enero de 2009

1998 - Najwajean: no blood

Carlos Jean Arriaga es un gallego de antepasados haitianos que ha revolucionado el concepto de productor en España. En 1998 forma junto a la actriz española más cool (la Chloë Sevigny española) Najwa Nimri, el dúo Najwajean y se dan a conocer con el álbum No Blood, primer disco de trip-hop español.

El dúo Najwajean consigue ser portada de las revistas más influyentes y entrar en la historia de la música en España, siendo elegido No Blood como uno de los mejores álbumes electrónicos de la década de los 90.

Najwajean aumenta su popularidad facturando dos versiones que ponen música a sendos spots de televisión: actualizan I´m Gonna Be (500 miles) y congelan Garota de Ipanema. La repercusión de No Blood hace que infinidad de artistas consagrados se fijen en la producción de Carlos Jean y aquí comienza la carrera del "Willian Orbit español".

Ahora regresan después de 10 años con su segundo disco Till It Breaks que se publicó el 1 de abril.

Han pasado diez años desde que Najwa Nimri y Carlos Jean unieron sus fuerzas para crear "No Blood", uno de los discos que marcaron tendencia en el final del siglo XX y acaparó multitud de premios. Después, la separación. Dos álbumes de bandas sonoras firmados por Najwajean para las películas Guerreros y Asfalto apenas pudieron llenar el vacío de un deseado segundo disco. Ahora, después de una década, llega "Till It Breaks", un álbum sorprendente, diferente y con mucha música dentro. Es el regreso de Najwajean, esperado con una expectación similar al magnífico regusto que, hace una década, dejó No Blood.

La banda está formada por Najwa Nimri (voz), Carlos Jean (multiinstrumentos), Javi Pedreira (guitarra eléctrica), Jacob Reguilón (bajo y contrabajo), Raúl Quílez (teclados) y Carlos Gamón (batería) y empezarán a girar por diversas ciudades en muy poco tiempo.

http://www.audiokat.com/

martes, 27 de enero de 2009

2002 - Cassino: consecuencias


Cassino – Consecuencias - 2002
Jabalina

Tras debutar con el ep Cuando Veo, en el que ya contaron con una colaboración de lujo, una remezcla de Nacho Canut, el dúo zaragozano Cassino nos presenta ahora las Consecuencias en formato larga duración de ese primer trabajo, un álbum que recoge las pautas que ya habían dejado marcadas. Este trabajo se aleja ya definitivamente de lo que supuso su primer proyecto musical, el entonces trío D’Estrellitas Powers, que por el año 1999 nos sorprendían con su pop fresco y efervescente y sus temas desenfadados y divertidos.

Tres años después, el ahora dúo formado por David y Raquel han podido dar forma a lo que ya se esbozaba en su debut. Consecuencias está formado por 10 temas, en su mayor parte discotequeros, y muy vitales, que beben directamente del techno-pop más ochentero. La sensación de estar inmersos en un revival es inevitable una vez terminada la primera escucha del cd, un revival, eso sí, que no se queda anclado en el pasado y se sirve de las diferentes tendencias y estilos que se han ido desarrollando a lo largo de los últimos 20 años.

Temas muy bailables, construidos a partir de loops de bases rítmicas sobre las que se asientan sonidos de teclados midi, con arreglos de guitarra muy cuidados para unas melodías de tempos muy diferentes a las que la voz de Raquel, en ocasiones inocente, en ocasiones descarada, se va adaptando según los diferentes registros que el disco plantea.

Los temas enganchan. Estribillos pegadizos, como es el caso de “Cuando Veo”, el tema central de su ep debut; temas como el amor y las relaciones entre jóvenes, el desamor, los celos, el miedo... temas universales, a veces alegres, a veces divertidos, a veces algo duros, como es el caso de “Sin Compasión”, una canción algo difícil (Sin compasión/ sabes que no/dijo que nunca te inclinaras hacia el lado de las personas que contaminan y distorsionan) pero al mismo tiempo fácil de recordar. Lo mismo ocurre con “Mi mente se colapsa”, es imposible escuchar esta canción y no quedarse con estas palabras.

También encontramos medios tiempos, como el tema que abre el disco, “En el plano opuesto”, envuelto en una atmósfera misteriosa, que sin duda nos hace adentrarnos con muchas ganas en el álbum, o como “Folstemteixon”, un título muy raro para una canción con unos toques dramáticos de teclado. De título también curioso encontramos “Spaitxumi”, el único tema en inglés del disco, con unos arreglos muy cuidados, que destaca por encima de otras canciones.

Un tema que destacaría especialmente es el que cierra el disco, “Tu noche en mi coche”, el más bailable de todo el álbum, con una letra desenfadada y divertida, que pone el broche de oro a un álbum muy fresco, sin duda, consecuencia del duro trabajo de Raquel y David, que desprende muy buenas vibraciones por los cuatro costados, y que tendremos la oportunidad de comprobar como suena en directo en la fiesta Lois del FIB .

maribel martínez - 18 de Julio de 2002 - 2222 visitas

http://www.muzikalia.com/leerdisco.php/358/cassino/consecuencias

2008 - Montevideo: Cuando miramos al sur

Montevideo - Cuando miramos al sur
Jabalina – 2008

Ha dado la casualidad que en el último año, dos de los grupos de Jabalina han cambiado su concepto de pop para acercarse a la electrónica de diferente modo. Souvenir modernizó su chanson a partir del electro y ahora Montevideo deciden cambiar el pop suave de sus dos primeros trabajos a un techno-pop que les lleva a encontrarse con los añorados 80s de algunos grupos. Como Los Carradine cantan en Sonad a Los Smiths: “Y dicen los niños que vuelven los ochenta”.

De su primer mini CD Ella y Él (2005, Jabalina) es complejo encontrar algo y de su primer largo, Transoceánico (2006, Jabalina), a lo sumo se ve la manera de cuidar algunos temas como Una Ciudad Feliz, más pausado y menos electrónico que el resto. La pareja formada por Manu C. Villalba y Damiana Dubatti, sevillano y uruguaya respectivamente, se trasladaron a Abrigueiro (Lugo), otra localidad con un encanto especial para las canciones, y grabaron con Arturo Vaquero estas canciones más directas que cualquiera de sus anteriores.

Las miradas se ponen rápido en el techno-pop de Europa pero también se podría ver directamente desde los grupos españoles que lo hicieron en su época. Toda la Movida madrileña influenciada en su momento por el uso de sintetizadores y bases electrónicas mantiene una relación mayor con Montevideo por el simple uso del idioma. Los nombres que se barajan son los buenos, nada de grupos de segunda fila, sino que Carlos Berlanga y su obra se pasa por Cuando Miramos Al Sur, al igual que se pasa La Mode o lo hace después Family ya a comienzos de los noventa.

Todos los temas guardan un buen sonido y cierta oscuridad que no impide el baile y la alegría. Destaca el inicio del trabajo frente al resto. Superstición gana enteros por la sorpresa de encontrarse a unos nuevos Montevideo combinando como nunca las voces en duetos chico-chica. Las canciones no se estacan en un hilo repetido que mantener sin cambios, sino que hay constantes subidas y bajadas, además de distorsión y voces en diferentes planos. Así Cuando Miramos Al Sur es la que resulta más pegadiza por el estilo de hit ochentero, al igual que Tiempo Muerto, siempre bajo una letra a veces triste y en otras con versos sobre el amor (Desde Que Estas Aquí).

Un tercer disco que mejora los anteriores con un buen cambio de calidad, conservando la delicadeza pero ahora desde la electrónica y el recuerdo a un buen sonido.

Natxo Sobrado 10 de junio de 2008 2 comentarios

http://www.hipersonica.com/2008/06/10-montevideo-cuando-miramos-al-sur

lunes, 26 de enero de 2009

2006 - Montevideo: Transoceanico

Montevideo
Transoceánico – 2006 Jabalina

Un nuevo largo para la colección con el prestigio de calidad del sello. Esta vez bajo la dirección de una pareja argentina-española formada por Damiana Dubatti y Manuel Villalba respectivamente. Si ya con su anterior EP "Ella y Él" (Jabalina, 2005) convencieron con una receta de pop y electrónica, con "Transoceánico" se ponen de largo para afianzar la confianza que antes se depositó en ellos.

Firman en diez canciones una buena lección de tranquilidad y emoción. No parten en la línea más orquestal del pop, sino que derivan a un uso de sintetizadores en casi todas sus canciones. Damiana y Manuel a través de cambiarse los roles en cada canción y ser voz o coro, consiguen esa frescura de los dúos mujer-hombre. Así se distinguen dos partes: Damiana defiende más las primeras dejando después a Manuel arrancar con “Te veo y no te veo”. El viaje transoceánico se puede ver en “Candombe” y “Zamba acuática” recuperando la música popular rioplatense y suramericana; además de continuar con canciones más rápidas con la Navidad de fondo (“Renos en la autopista”), “Dejando una señal” con un apoyo más electrónico como “Autoinmunidad” que podría quedarse cerca de una versión suave de tecnopop, y la que da título al disco donde se podría ver un intento de downtempo. Marco Maril (Apenino), además de ser el presidente de su club de fans, les vuelve a acompañar con la guitarra e instrumentos como el ukelele y la mandolina. Quien también repite es Arturo Vaquero (Humanoid) a la producción y con numerosos arreglos.

Pop delicado con claras reminiscencias a Entre Ríos, Apenino, The Magnetic Fields, The Postal Service y Nadadora. Da gusto viajar con tanta delicadeza.

http://www.popchild.com/

domingo, 25 de enero de 2009

1982 - Carlos Guirao

Carlos Guirao
Revelation - 1982
Neuronium Records / Auvisa, formato LP, no reeditado en CD

Poco antes de que el grupo Neuronium se escindiera en sus dos elementos, Michel Huygen, el cual se quedaría con el nombre del grupo por un lado, y Carlos Guirao por otro, este último realizó en 1982 este trabajo en solitario. Es posible que este disco haya sido el paso definitivo previo para la disolución del grupo Neuronium, aunque esto es una historia posiblemente demasiado compleja que no interese desde el punto de vista musical.

El LP de vinilo viene en una carpeta sencilla de color arena con una fotografía delantera que consiste en la misma imagen de Carlos Guirao que aparece en el álbum Digital Dream, y procesada en tonos rojos y verdes con efectos de Tomás C. Gilsanz.

En la portada aparece el título Revelation y bajo él, el nombre de Carlos Guirao al que se le añade "Neuronium Synthesist". En la contraportada aparece una fotografía de Carlos Guirao rodeado del siguiente equipo: Yamaha CS30, Korg MS20, Korg SQ10 sequencer, ARP Soloist, Godwin Strings, Casio VL1!!!, Pearl Syncusion y Korg Rhythm. Además, en los créditos se indica que también se utiliza un Korg PS3200.

A la vista del equipo podemos deducir el tipo de música con que nos vamos a encontrar; analógica y con secuencias de pocos pasos. Además, es parte del equipo utilizado en el álbum Digital Dream y nos lleva a preguntarnos: ¿se habrán llevado cada uno la mitad del equipo? o ¿han acabado como amigos y se intercambian el equipo?

En los créditos se indica que se grabó en Barcelona en marzo de 1982 bajo la dirección de Santi Picó y colaboraron como músicos José María Ciria y Manolo Torres, ambos como percusionistas.

Carlos Guirao acabó sepultado por un proyecto de tecno-pop llamado Programa pero este trabajo no tiene nada que ver con esta negativa, a mi modo de ver, evolución, y mucho que ver con los anteriores trabajos de Neuronium.

El trabajo en conjunto presenta una innegable continuidad entre los temas, tanto en timbres como en atmósferas sonoras.

El primer tema titulado "Revelation", de unos 6 minutos, se basa en una secuencia de fondo sobre la que ataca un sonido de sintetizador clásico, un fondo de cuerdas analógicas y una batería acústica (José María Ciria), creando un tema a unos 110 bpm muy pegadizo pero de contenido superficial que evoluciona a un corte de música electrónica alemana de los 70 en un final corto y especialmente bien desarrollado.

El segundo tema titulado "Devil Times" dura unos 7 minutos y medio y comienza con una atmósfera claramente 'phaedriana', voces tenebrosas, efectos de Pearl Syncusion y densas cuerdas sinfónicas creando una atmósfera gótica que evoluciona a una densa secuencia de sonido analógico y 'drums' muy alemanes para dar paso, mediante un desvanecimiento en unas agudas cuerdas, a 3 minutos con una secuencia analógica de base con únicamente 6 pasos a los que se les superponen unas cuerdas profundas y un fraseo de sonido de sintetizador analógico con ataque, que es capaz de absorber por completo la atención y hace que la música siga sonando en tu cabeza después de haber acabado.

El tercer tema titulado "Stonehenge" sigue la misma línea de densa atmósfera sinfónica con secuencia repetitiva pero aquí aparece una percusión acústica a base de 'tams' y timbales que recuerdan a ciertos fragmentos de Ricochet de Tangerine Dream. El tema dura 4 minutos y medio y al final da una cierta impresión de enmarañamiento musical.

El cuarto tema, último de la cara A del disco, se titula "The Triangle" y se basa en uno de los típicos y clásicos arpegios de guitarra acústica de Carlos Guirao sobre los que suena un vibráfono. Es un tema corto, de unos 2 minutos, muy acústico y agradable.

La cara B del disco comienza con un tema largo, de unos 17 minutos, titulado "Walking Across The Garden Of Your Mind", en el cual unas cuerdas densas y sinfónicas crean una atmósfera desgarradoramente triste que, de repente, introduce una secuencia de bajos al más puro estilo clásico electrónico alemán que expresa claramente la idea de un viaje. Efectos muy analógicos y correctamente utilizados introducen fraseos cortos como a modo de descripción de diversos paisajes mentales mientras que la secuencia cambia y evoluciona sin perder ni un instante ese lazo de atracción que nos sujeta, y que es reforzado por los coros de cuerdas que nos devuelven a un estado de inquieta estabilidad en una nueva atmósfera para pasar a una sensación de tranquilidad y una nueva secuencia analógica, batería acústica y frase analógica al más puro estilo clásico.

El último tema "Theme For A Silent World", de 3 minutos, es un pequeño himno que destila despedida por todas sus notas. Cuando lo escucho pienso: ¿lo habrá escuchado Jarre antes de hacer su "Oxygène 13"??? Está realizado mediante una base de caja de ritmos y secuencia de bajos con una frase de onda triangular y unas cuerdas puramente analógicas que finaliza en un sonido sintético de flauta con mucha reverberación para dar un merecido final al trabajo.

En resumen, se trata de un trabajo muy interesante que se basa en las composiciones electrónicas clásicas y que, desde mi punto de vista, deja clara la influencia de Carlos Guirao en la densidad musical que Neuronium había mantenido hasta entonces y que posteriormente desapareció, convirtiéndose en un sinfín de sonidos digitales.

Manuel Jesús Rodríguez (mayo, 2002)

2007 - Nikka: Isótopos

Nikka - Isótopos - 2007
Lovethechaos (España)
IDM

Isótopos es uno de los mayores compendios de glitches, clanks, clonks, crujidos, sonidos retorcidos, alargados, exhaustivos e inquietantes que ha aparecido en nuestro país en los últimos tiempos. Cuando parecía que aquí no había demasiada vida más allá de la pista, aparecen pequeñas manifestaciones de energía como estos 8 isótopos que forman el primer trabajo que protagoniza Nikka desde Barcelona. Y es que esta chica arranca en Uranio entre susurros espaciales y sonidos retorcidos para avanzar durante poco más de media hora una idm completamente envolvente e industrial donde la palabra error alcanza cotas máximas (Neptunio es simplemente brillante). Un viaje sin fin entre tinieblas (como las del remix del Inorganic Agent), pesadillas (Host) y sensaciones metálicas y melancólicas. Lo suyo no es un trabajo casual, es el resultado de un elaborado homenaje a las máquinas, a las sombras y a los sueños, los suyos y los de muchos de nosotros.

Escrito por Fran Suarez el 23 de octubre de 2007

http://www.clubbingspain.com/

martes, 6 de enero de 2009

2002 - Humanoid: Romance

Humanoid
2002 - Romance
Sello: Jabalina

¡¡Qué bonito!! Esto es lo que exclama uno al terminar de escuchar por primera vez el disco de Humanoid.

Arturo Vaquero nos acerca un disco lleno de minimalismo y con una preciosidad y buen gusto propios de este Dj lugués de origen vasco. Y la verdad es que se acerca más a la filosofía de grupo que de Dj en sí. Ya que Humanoid lo componen el propio Vaquero con la compañía de Laura Romay al bajo y Carmen Álvarez a la voz.

Es éste su tercer trabajo, después de Vectospheres (98) y OCR (99). Como vemos se ha llevado su tiempo de preparación y realización. Y la espera se muestra en un Lp trabajado y germinado de tal forma que nos deja entrever una atmósfera de sonidos que llegan a rozar con el chill-out, sin llegar a serlo del todo.

Es normal que un Lp como éste lleve tanto trabajo y tiempo. Y es que Humanoid han reunido para este trabajo a gente como Iranzu Valencia de La Buena Vida, Ricardo Rodríguez de sus paisanos Hollywater, Belén Rodríguez de sus otros paisanos Apeiron, así como Xavier Font de Dar Ful Ful, también a Xesca Fort de Alias Galor y Pamela Abraldes de GBR.

Comienza el disco con “Letter”, la cual ya nos dirige hacia dónde nos vamos a encontrar en esta travesía. Grandes voces acompañadas de bases electrónicas sin grandes alardes de chunda – chunda. No es sólo eso la electrónica. Y Humanoid nos lo demuestra. Para muestra un botón, ... o mejor una canción. Así, por ejemplo, tenemos “Logical Love” donde volvemos a ser conscientes de esto. Es un tema que me recuerda a un “All You Need Is Love” de The Beatles, pero made in Humanoid.

Con “My Room” la voz se convierte en una voz infantil, donde parece ir leyendo en un papel lo que dice la letra, y la música marca el ritmo de la pequeña lectora. Original. No ocurre esto con “Canción Del Extranjero Siempre”, donde la única voz masculina del disco cobra su protagonismo.

En “Deep Inside” el vocoder es el que pide su sitio. En “Perdí La Razón” tenemos una canción pegadiza y donde la melodía recuerda a una flauta delicada. Es una melodía que te lleva a silbarla a la vez que la escuchas.

Pero la mejor canción del disco, para un servidor, es “Pale Face” que recuerda a los temas más clásicos de la electrónica ambiental de los 80, aquellos de Vangelis, Eurythmics (en su vena más ambient), etc...

Con “La Tortuga Y El Mar”, plenamente instrumental, con sonidos de piano, y “Romance” se llega la lentitud máxima del disco, con el minimalismo de cara: una acoge el instrumentalismo, y la otra la voz definiéndonos qué son los besos.

“Lunas” sigue la misma tónica del disco, al igual que “In The Sunshine”. Y el aspecto más folclórico lo tenemos con “Lost In N.Y.”, donde recogen los sonidos de un instrumento clásico de la música gallega: la gaita.

Disco incluido el: 09/12/2002 - Redactor: Juan Vila
http://www.muzikalia.com/

domingo, 4 de enero de 2009

2006 - Astrud: recopilatorio caras b

Primer concierto de la mini-gira de Astrud: extraño lugar, el auditorio de una universidad pública catalana. Y Manolo, uno de los mejores vocalistas del indie nacional, a nuestra disposición durante quince minutos. Difícil de mejorar por el momento. Pero entonces salen al escenario y te dejan sin palabras. No te los pierdas si pasan por tu ciudad. Si no, al menos podrás saber qué opina uno de los componentes del grupo más personal de la escena pop.


1996-2006, ¿diez años es un buen momento para un recopilatorio de caras b?

Es casualidad, hacía ya un par de años que teníamos ganas de sacar las caras b. Sobretodo en la época de Virgin, pero ahora también con Todo nos parece una mierda, pero siempre sacamos singles. Es una manera de obligarnos, o de animarnos. Aparte, es mucho más fácil que un LP. Con un LP siempre tienes más dudas, hay manías y prejuicios de cómo tiene que ser... Una cara b parece que tiene menos importancia... Lo de los diez años ha sido una excusa.

Astrud es un grupo con gusto por los singles, las caras b, en cambio parece que se ha perdido un poco esta "moda"...

¿Sí, tú crees? No sé, no tengo ni idea. Eso sí, de poca gente se escucha tanto las caras b como de nosotros. No sé por qué, pero algunas de las canciones que tenemos en el repertorio y que la gente más corea son caras b. Es casualidad. Y la razón es que nosotros no hacemos descartes. O sea no tenemos quince canciones para el álbum y escogemos once y el resto son caras b. Componemos directamente para la cara b, así que pueden quedar más chulas o menos que las del LP.

Con un LP siempre tienes más dudas, hay manías y prejuicios de cómo tiene que ser. Una cara b parece que tiene menos importancia. Lo de los diez años ha sido una excusa.

¿Cuál es tu valoración de estos diez años con Genís, diez años del grupo? ¿Te puedes quejar?

No, claro que no me puedo quejar. Hemos conseguido lo que mucha gente no ha conseguido nunca: tocamos y la gente viene a vernos, sacamos discos y hay quien nos quiere publicar y los compran cinco y se lo bajan quinientos... Está guay. Somos un grupo que tenemos nuestro pequeño hueco. Eso sirve para que podamos tocar mucho y malvivir de la música. Nunca seremos un grupo super importante, pero para serlo hay que ser un grupo de mierda...¿en español? Si no es así, no puede ser...

¿Qué ha cambiado Astrud en diez años?

Estamos más viejos. No sé si más viejos, pero sí muy diferentes. ¿En qué hemos cambiado? En todo, Genís lleva el pelo largo, yo llevo barba. Y musicalmente, poca cosa. Supongo que escuchando los discos seguidos sí se nota. Pero desde dentro no hay ni ganas de evolucionar, o sea, que cada disco es una cosa distinta y como en cada momento hacer una cosa diferente para que nos tengan que seguir la pista... A veces estás como obligado por ti o por los demás a hacer siempre lo mismo... Y espero que todo cambie mucho, pero no por diez años, sino porque todo cambia rápidamente.

¿Qué sigue de la esencia de Astrud?

Muchas manías... A la hora de hacer canciones, cosas que no se pueden decir porque son ridículas y la gente se ríe sin parar cuando las decimos. Y las ganas del grupo de música, claro. Al principio ensayábamos cada día y seguimos ahora con muchas ganas.

¿Cómo se lleva eso de ser uno de los grupos consolidados del panorama indie? Primero fuistéis la gran promesa, luego llegó el boom, las ventas, que todo el mundo conozca a Astrud. Y ahora diez años de carrera, con proyección y trayectoria...

Es guay, la verdad es que en esto del "indie" hay cuatro grupos que de verdad tengan una trayectoria, o que más o menos puedan continuar. Y ser uno de esos grupos, no sé, por buena suerte, por talento, por casualidad, mira, por lo que sea... Pues suerte, la verdad.

Arty es hablar de tal poeta que te has sacado de la manga y hacer un disco musicado de sus cosas, o hacer una canción sólo con nombres de mariposas, como los Cocteau Twins. Eso es arty. ¿Pero lo nuestro?

¿Cuánto de eso tiene que ver con que seáis radicalmente diferentes a los demás grupos? ¿Que no sé pueda decir: Astrud se parece a...?

Espero que mucho, la verdad. Bueno, somos un grupo de canciones y un grupo pop que entramos netamente en la definición del género. Pero sí, se trata de no decir obviedades, de no decir lo que dice todo el mundo. Espero que estemos aquí porque el grupo mola. Pero también puede ser que no, porque a veces los grupos por lo que triunfan es por lo peor que tienen, por lo más obvio... No sé, grupos que me encantan, como los Planetas, si triunfan es por lo peor que tienen. Por esta cosa de la distorsión, el escapismo de las letras, eso de tanta droga y tanta polla. Pero en cambio son un grupo de puta madre y hacen cosas bien chulas.

En cambio vosotros habláis de otras cosas, ¿no se te hace raro que la gente conecte con vuestras letras, que a veces parecen una ida de olla?

¿Tú crees? A mí no me lo parece. Yo creo que para entenderlas basta con entender el castellano, y yo creo que es un mérito. Que no haga falta mirar el diccionario, o no sé. Que las letras no estén llenas de metáforas, sino que todo es muy claro. Y yo creo que son cosas que la gente comprende. ¿Tenemos la etiqueta de arty? Sí., es una etiqueta muy tonta. Pero a mí no me molesta lo más mínimo. Mejor esa que capullo, ¡no sé! Que también nos lo dicen, por cierto, de vez en cuando (...) ¿Nuestras referencias en las letras? ¡Si son todas de lo más obvio! ¿Qué tiene de arty hablar de Luis Cernuda, por favor? Si la cosa más obvia y más ridícula. Arty es hablar de tal poeta que te has sacado de la manga y hacer un disco musicado de sus cosas, o hacer una canción sólo con nombres de mariposas, como los Cocteau Twins. Eso es arty. ¿Pero lo nuestro? A mí me parece bien, ya te digo que no me molesta.

¿Qué falta por hacer?

No sé, muchos discos más. Una carrera de veinte discos, como Bob Dylan. Eso es lo que tenemos que hacer. O sea, lo nuestro es eso: hacer una carrera muy larga y que se acabe todo y que hayamos hecho muchos discos, sería guay. Y cuándo nos damos cuenta que nos queda algo por hacer, lo hacemos inmediatamente. Ah! Y una obra de teatro, un musical estaría guay. Uno con sus maquillajes, con un columpio en medio de escenario, con personajes... Caracterización, monstruos. Una cosa muy así...

TEXTO: Patricia Arcas Llamazares

2004 - electrospain

ElectroSpain pretende recopilar y dejar testigo de un movimiento- antimovimiento que parte de la influencia de los 80 (algunos por el electro y la new wave, otros via punk, y muchos mezclando estos estilos), cuyo lema es el "todo-vale". No importa la calidad del sonido sino el desparpajo, el descaro, la actitud irreverente, el ácido sentido del humor.

Algunos de los grupos se dan a conocer aquí, ya que muchos de ellos aun no han editado nada y solo son conocidos en pequeñas comunidades en internet. La selección, coordinación y producción ejecutiva corre a cargo de LKan, agitadores de esta miniescena desde su grupo y su club Ochoymedio. Los grupos son: Dirty Princess, Chico y Chica, L Kan , Ciëlo, Mano de Santo, Alma X, Begoña, La Monja Enana, Superputa, LO-FI, Gore Gore Gays, Buble Gum, Focomelos, Baby Horror, Qué Out, Lemonfly, Insulina y las Poni Girls, Las Desis, Margaret Astro, Decodeck y La Rubia Montoya.

ElectroSpain
Electrónica
03/02/2004

DIRTY PRINCESS - Jugar al reves
CHICO Y CHICA - Lady ole
L KAN - Aburrida de estar salida
CIELO - Radio subterránea
MANO DE SANTO - La canción de tu vida (remezcla garaje)
BEGONA - Criminal (Version Demo)
ALMA X - Crimen en levante
LA MONJA ENANA - Una vida normal
SUPERPUTA - Nintendo (Sky-lab mix)
LO-FI - interferentes
GORE GORE GAYS - Mi chico
BUBLE GUM - La dama del lago
FOCOMELOS - Mami me he tragado el disco de Depeche Mode
BABY HORROR - Lucha contra el tekno
QUE OUT - Indiegente
LEMONFLY - Miénteme otra vez
INSULINA Y LAS PONI GIRLS - Ultrapreñada
LAS DESIS - Mucho indie y tecnopop
MARGARET ASTRO - Todo por un yate
DECODEK - Serenity
LA RUBIA MONTOYA - Todo vale

http://www.lahiguera.net/musicalia/artistas/varios/disco/1272

sábado, 3 de enero de 2009

2003 - Cosmos records: Discografia

Discografia: 1995 - 2003

COSCD001 Various – 1995 Disco 2000. Una Recoplación Dance De Aquí (CD)

COSCD002 Alex Martin Ensemble – 1995 Come Into Cosmos (CD)

COSMX001 Alex Martin Ensemble - 1995 Come Into Cosmos (12")

COSCD003 Peanut Pie – 1996 Peanut Pie (CD)

COSCD004 Madelman – 1996 Palais (CD, Album)

COSCD005 Various – 1996 Cosmosound 1 (CD)

COSMX003 Vanguard – 1997 Jet Set (12")

COSCD007 Various – 1998 Cosmosound 2 (CD)

COSLP002 Various - 1998 Cosmosound 2 (2xLP)

COSMX004 Easy – 1998 Easy Does It (12")

COSMX005 Congosound, The – 1998 Jessie's Theme (12")

COSMX006 Funk Empire – 1998 Superfly (Vinyl, Maxi)

COSMX007 Easy – 1998 Easy Going (12")

COSCD008 Various – 1999 Cosmosound 3 (CD)

COSCD012 John Landis Fans – 1999 Songs For The Frozen Latitudes (CD)

COSCD013 Various – 1999 Manta Ray Vs. Cosmos - Pequeñas Puertas (CD)

COSLP003 Various - 1999 Cosmosound 3 (2xLP)

COSMX008 Chop Suey – 1999 The Boygirl (12")

COSMX010 Professor Angel Dust – 1999 First Commandment (Thou Shalt Funk) (12")

COSCD011 Funk Empire – 2000 Music (CD)

COSCD014 Easy – 2000 It's Easy (CD)

COSCD015 Various – 2000 Cosmos 2000 (CD + CD)

COSCD019 Manoukian – 2001 La Vida Es Como Una Canción De Titulo Corto (CD)

COSCD020 Aviador Dro – 2001 Mecanisburgo (2xCD)

COSCD022 Alex Martin Ensemble - 2001 Tres (CD)

COSCD023 Braille - 2001 Día Mes Año (CD)

COSCD024 Domestic – 2001 Domestic (CD)

COSCD025 Congosound, The – 2002 Jackson (CD)

COSCD027 Chop Suey - 2003 Self-Help Songs (CD)

viernes, 2 de enero de 2009

2005 - musica electronica en castellano 1975-2005

Introducción

La música popular del siglo pasado y el actual, aun teniendo sus orígenes en la cultura anglosajona (Estados Unidos e Inglaterra, principalmente), ha conocido adaptaciones locales en los diversos países donde se ha extendido su influencia. Actualmente no nos extraña oír cantar a grupos de rock o de pop en castellano, catalán, euskera o gallego. La música electrónica también ha tenido su principal origen en los citados países anglosajones. Incluso un grupo clave como los alemanes Kraftwerk, a pesar de cantar en su lengua nativa, lanzaban las versiones internacionales de sus discos en inglés, las cuales han sido más conocidas por nuestro público.

Si el rock o el pop han sabido utilizar la lengua autóctona para expresar una misma música, lo lógico debería ser que algo similar ocurriese en el caso de la música electrónica. A continuación se citarán algunos de los grupos que han hecho uso de la misma con sus propuestas de electrónica, aunque hay que recordar que algunos de los estilos más conocidos de esta música (techno, house, drum’n’bass, electro,...) tienen un gran componente instrumental, en el cual las voces en ocasiones pasan a un segundo plano o simplemente no existen.

También se ha de señalar que los conocimientos del autor respecto a dicha música son limitados y no abarcan todas las diferentes manifestaciones existentes, por lo que la lista de nombres no es exhaustiva y puede haber omisiones. Al lector se deja la posibilidad de continuar explorando este fascinante mundo.

Pioneros de los 70 y los 80

Uno de los pioneros de la música electrónica en España es Eduardo Polonio que comenzó a realizar obras de electroacústica ya a finales de los años 60. Formó además el grupo Alea-Música Electrónica Libre. Sus composiciones de carácter experimental poseen unos curiosos títulos tales como Difícil que las margaritas beban en la fuente, Hoy comemos con Leonardo o En un eclipse, en un eclipse total, en un apagón general del Universo, por citar algunos dentro de su extensa y desconocida producción. En Barcelona se puede destacar de aquella época a Macromassa, grupo formado por Juan Crek y Víctor Nubla, que también poseen obras con títulos curiosos (y en algunos casos también curiosas letras) como El consecuente aspecto de la geometría o El largo camino a las almendras.

Dejando de lado las primeras incursiones electrónicas experimentales, se puede decir que la primera manifestación de música electrónica en castellano de mayor repercusión se produce con los grupos del llamado techno-pop (synth pop para los ingleses) a finales de los 70 y principios de los 80. Los pioneros El Aviador Dro y sus obreros especializados tenían en su haber canciones reivindicativas, futuristas o humorísticas como La chica de plexiglás, Nuclear, sí, La televisión es nutritiva, etc. Sus influencias vendrían de grupos como Kraftwerk, Devo y los grupos de synth pop ingleses que estaban empezando a surgir en los primeros años de la década de los 80. Y a pesar de esta influencia en lengua inglesa, dichos grupos decidieron utilizar el castellano para sus composiciones como forma de hacer llegar su mensaje de una manera más natural. Y la gente lo aceptó sin problemas. Incluso los propios Aviador Dro se atrevieron a realizar una versión en castellano del exitoso tema de Kraftwerk (The Model / Das Modell), con el título La Modelo. Hoy en día siguen en activo fieles a su filosofía aunque han actualizado su sonido y a alguno de sus miembros.

Otro grupo de la época que se puede citar es Esplendor Geométrico, surgido tras la escisión de algunos componentes de Aviador Dro, los cuales antes de embarcarse en una trayectoria de ruido y pulsión rítmica, elaboraron algunos temas de techno-pop como Moscú está helado. Posteriormente, aunque sus trabajos eran predominantemente instrumentales, poseían la mayoría de los títulos de los temas en español, algunos incluso incluyendo muestras sonoras de voces en castellano (también utilizaban de otros idiomas, por supuesto). Un ejemplo, con algo de ironía, puede ser 30 Km. de radio (Veritatis Remix) del álbum Balearic Rythms (1996) en el que bajo unos potentes ritmos industriales se puede escuchar a un anónimo locutor de radio recitando los misterios de la pasión de Cristo.

Junto a éstos existían otros grupos como Metal y Ca. con temas como Datos, Planeta o Velocidad; Oviformia Sci con Hablamos de nosotros o Mi teletipo; o los aragoneses Vocoder (Mi chica tiene un lío con Satán, Amor de robot) y Vam Cyborg (Actos de maldad o Radioactividad, que no se trata de una versión de Radioactivity / Radioactivität de Kraftwerk).

Otro grupo de la época fue Azul y Negro, más comerciales que los anteriormente citados y que obtuvieron bastante popularidad. Uno de sus primeros temas (Me estoy volviendo loco) fue utilizado como sintonía para los reportajes de televisión de la Vuelta Ciclista a España en el 1982, un año antes de que Kraftwerk publicaran su Tour de France. De este modo alcanzaron gran repercusión entre el público general, a pesar de sus sonidos sintéticos y sus voces robotizadas. Desde entonces siguieron editando LPs en los que las canciones no instrumentales eran casi todas en castellano.

Siguiendo en la onda techno-pop, que era lo más conocido en cuanto a electrónica en aquellos primeros 80, también hay que destacar a Tino Casal, quien facturó algunos temas clásicos como Champú de huevo, Tigre bengalí, Bailar hasta morir o Embrujada. Uno de sus mayores éxitos fue Eloise, tratándose en este caso de una versión del tema de Barry Ryan.

Valencia no fue ajena a aquellas influencias de sonidos electrónicos y futuristas. En aquella época, una efervescente escena de grupos de todos los estilos también dio origen a algunas bandas que si bien no parecen ser tan recordadas, merecen una mención. Los grupos más destacados que pueden citarse son Glamour, con joyas como Imágenes, No llores junto al estéreo, En soledad...; Betty Troupe, con la archiconocida El vinilo; Video (La noche no es para mí, Víctimas del desamor) o Última Emoción (El misterio de los tomates eléctricos, Dos minutos de odio), entre los que dejaron huella sonora.

Los años 90

Precisamente del grupo Última Emoción, uno de sus componentes (Julio "Nexus" Pastor) se une a dos DJs (Gani Manero y Fran Lenaers) para crear una de las formaciones míticas de principios de los noventa y pioneros del llamado "Sonido Valencia". Nos estamos refiriendo a Megabeat. Este grupo estaba influenciado por artistas como Wim Mertens, Vangelis (sobre todo su banda sonora para la película Blade Runner) y grupos de EBM que sonaban habitualmente a finales de los 80, de los que realizaron versiones. Es por ello que la mayoría de sus composiciones está en inglés y también alguna en alemán, aunque gran parte de sus temas son instrumentales. Sin embargo, también deciden titular varias canciones con títulos en castellano e incluso añaden muestras vocales como el clásico Es imposible, no puede ser... También serían aficionados a incluir muestras de la exitosa serie de TV Twin Peaks. Así pues, tenemos temas como Jet Harris Techno Dub (¿Sabe ya quién mató a Laura Palmer?) o Fuego camina conmigo, que incluyen grabaciones del doblaje al castellano. Otros temas a destacar serían Hoy es un buen día para morir o Te suena.

Esos primeros 90 vieron crecer el fenómeno de la Ruta del Bakalao, que si bien tuvo sus orígenes en los 80 con la mezcla de diferentes estilos musicales, es ahora cuando se vuelve más electrónica y cada vez más dura. A parte de los ya mencionados Megabeat, uno de los primeros en atreverse a sacar sus discos es el DJ Chimo Bayo, que alcanzó una enorme repercusión tanto en España como en otros países con su tema Así me gusta a mi, cuyo explícito estribillo ("Exta-si, exta-no / ésta me gusta, me la como yo") era tarareado hasta por los adolescentes. Posteriormente seguiría con sus temas de base EBM pero con letras en castellano (Bombas, Química o La Tía Enriqueta).

Otra serie de grupos se dedicaron a producir sus propios discos orientados claramente para la pista de baile en una desenfrenada carrera que posteriormente tendría consecuencias nefastas. De todos ellos algunos se atrevían a utilizar el castellano ya fuera para el nombre del grupo o para los títulos o las letras de sus temas. Citaremos algunos ejemplos a modo informativo, ya que su legado no es que haya pasado a la historia de la música popular más allá del recuerdo nostálgico de los que vivieron aquella época. Algunos ejemplos de grupos o proyectos serían los siguientes: Tribunal de las Aguas, Vengadores, Teknika con temas de EBM como Yo no pienso en la muerte, Furtivo o Makinación; Dunne (Espiral), Vodevil (Ven con nosotros), Paco Pil con su colección de temas makinero-festivos (Viva la fiesta, Dimensión divertida o Johnny Techno Ska), Rafa Villalba (Chiketere), Flash Zero (Raya España 21) o MPM con su tema Sube que te llevo de un mensaje bastante directo ("Cuatro ruedas tiene mi coche / Cuatro pastillas me como esta noche"), entre otros.

En ese mismo periodo (principios de los 90) hubo un fenómeno bastante curioso. Ocurrió algo así como un resurgir en España del techno-pop, sobre todo influido en este caso por bandas como los ingleses Depeche Mode que habían conseguido superar los 80 y continuaban en los 90 con gran éxito de público. Estas bandas que surgieron en nuestro país también tenían el punto en común de utilizar el castellano en sus letras. Así pues tras los pioneros OBK, que aún hoy (2005) siguen en activo, surgió toda una serie de grupos que hicieron de los sintetizadores su principal herramienta, sin despreciar en algunos casos los instrumentos clásicos (guitarra, bajo y/o batería). Bandas como Viceversa, Luxury Beat, DC3, Éxodo, Santuario, Niños del Brasil, Qun Qun, Berlín o Ray, surgieron en aquella época, a pesar de que su duración fue más o menos breve. Generalmente (no todos) eran grupos con una clara orientación para las radiofórmulas, con unas letras romanticoides bastante ñoñas, aunque ciertas producciones no sonaban del todo mal.

OBK, en todo momento, han utilizado el castellano para sus letras (excepto alguna versión de Depeche Mode). También se han atrevido a adaptar al castellano canciones extranjeras como el tema Strange Affection de los alemanes De/Vision, que apareció con el título A ciegas. Este dúo catalán surgió en 1990 y con su primer álbum Llámalo sueño (1991) ya comenzaron a disfrutar del éxito, sobre todo con temas como Oculta realidad o Historias de amor. Durante la década seguirían sacando nuevos álbumes con mayor o menor fortuna, de los cuales se pueden destacar canciones como Dicen o Instinto de placer, por citar alguno de su amplia discografía. Tras unos pequeños baches y dudas, en el 2000 editan su álbum Antropop, con el que vuelven a obtener el éxito, sobre todo gracias a la publicidad que les hace el que su tema El cielo no entiende sea elegido como sintonía para las retransmisiones por TVE de la Vuelta Ciclista a España (tal y como ocurrió en los 80 con Azul y Negro), hasta llegar a día de hoy en que disfrutan de una posición con un razonable éxito de público, a pesar de no gozar de los favores de la prensa.

Del resto de grupos citaremos algunos de sus trabajos, a modo informativo, aunque sí que es cierto que algunos de ellos merecerían un mejor recuerdo: Viceversa (Ella), Luxury Beat (Cierra los ojos), DC3 (Generación), Éxodo (Autismo), Santuario (La puerta del placer), Niños del Brasil (Dame tus manos), Qun Qun (De carne y hueso), Berlín (Cuando el cielo deje de existir) o Ray (Mañana).

A mediados de los 90 comenzaron a dejarse notar otras alternativas a la música electrónica de baile. Se trataba de acercar otros sonidos que llegaban de diferentes partes de Europa y de Estados Unidos. Así pues, esta electrónica fue poco a poco colándose en distintos aspectos de la música, desde festivales a revistas de música más orientadas al pop o al rock. Incluso el festival exclusivo de música electrónica (el Sónar de Barcelona) fue cada vez más reconocido, con lo que la afluencia de público aumentó. El auge de estas “músicas avanzadas” también permitió que artistas locales se atrevieran a producir su propia música. Aunque lo normal solía ser la utilización del inglés para titular los temas, que en muchos casos suelen ser instrumentales, también existen algunos artistas que utilizan el castellano o el catalán (como An Der Beat con su Recicla-ho).

Dentro de esos autores que no utilizan el inevitable inglés que todo lo invade, se puede hablar de Madelman, el cual sacó en 1996 una de las joyas de la electrónica nacional de esta década, Palais. Dentro de este disco, de un estilo variado pero con el gusto por las melodías y el pop, además de una buena colección de sonidos y samples, aparecen temas como Favorita, Chao, amigo o Eurovisible. El resto de canciones sí que utilizan la lengua de Shakespeare, aunque sólo en los títulos puesto que se trata de temas instrumentales con alguna que otra muestra vocal pero tratada como un sonido más. Otro tema curioso es el que aportó al homenaje a Tim Burton que hizo el sello Spicnic. Dentro del recopilatorio Spicnic en No-Mundo, Madelman incluye el tema Se acabó el calentamiento, empieza el enfriamiento. Desafortunadamente, el grandioso Palais no ha tenido continuación y los únicos trabajos adicionales de los que se puede comentar son las remezclas que ha hecho para otros grupos.

En un plano más experimental hay que destacar a Silvania, peruanos de origen que, primero desde Valencia y posteriormente desde Madrid, lanzaron algunos de los discos más interesantes de la electrónica nacional. Comenzaron con una mezcla de pop y experimentación sonora, tal como se puede apreciar en sus primeros trabajos Miel Nube Hiel (1992) y En cielo de océano (1993). Tras posteriores singles y un disco de remezclas (Delay Tambor, 1996) realizado por artistas internacionales (Autechre, Scorn o Seefeel, entre otros), aparece en 1997 el álbum Juniperfin donde se mezclan ritmos electrónicos minimalistas, ambientes planeadores, melodías evocadoras y ruidismo. En su etapa pop sí que solían introducir letras en sus canciones pero ahora se centran únicamente en el sonido, sin dejar de incorporar de vez en cuando voces muestreadas como en Ialu. Dentro de este disco encontramos temas como Isonauta, Júniper o Cielo. El siguiente álbum (Naves sin puertos, 1998) continúa en la línea de experimentación sonora con temas como Niños de lluvia (Polaroid), Marea, Nave o Aquí viene el océano, por citar algunos. Más tarde unen fuerzas con Prozack, formando Radio, con cuya denominación lanzaron un CD (Radio, 1999) y un LP (El aire está vivo, 2000). También Prozack utilizó el castellano para titular los temas de sus dos últimos álbumes, tras uno primero de títulos en inglés (Ideology, 1996). Dichos trabajos son Tan lejos (1998, con títulos como Dualidad, Desajuste o Intangible) y Dispersión (2000), en el que se incluyen Ícaro, La escalera o Arqueología, entre otros.

HD Substance, además de varios maxis, lanzó un par de álbumes (Eleven, 1997 y Cáncer pop, 1999) en los que alguno de los temas está titulado en castellano. En el primero se encuentra el tema ¡Que aproveche! y en el segundo Bicho pantanoso, Corriente contínua o Londres es frío. También Resonic publica algún maxi con títulos como Lunático (1996) en el que se encuentran piezas de techno bailable como Sr. Lobo y Meditación, o Residual (1998).

En el pop independiente también existen bandas que basan su propuesta en la utilización de la tecnología y utilizan la lengua nativa. Unos de los más conocidos son Fangoria, proyecto de Alaska y Nacho Canut . Tras formar parte de KK de Luxe y Alaska y los Pegamoides, en 1989 deciden formar Fangoria, basándose en un pop electrónico con la mente puesta en la pista de baile. Una duradera trayectoria dentro de la independencia que les ha mantenido hasta hoy. Sus trabajos van desde Salto mortal (1990) hasta Arquitectura efímera (2004), su último álbum hasta la fecha, pasando por la trilogía Un día cualquiera en Vulcano (1992, 1993, 1995), Una temporada en el infierno (1999) o Naturaleza muerta (2001). En el disco Interferencias (1998) se dejan remezclar por artistas como Madelman o Intronautas. Por su parte, Nacho Canut con su alter ego Calígula 2000 publica discos de corte bailable: Los 5000 dedos del Doctor C (1995), Mar i nit (1996) o Apoptosis (1999). También se pueden citar a otras bandas de pop electrónico como L-Kan, Astrud, Ellos, Lemon^Fly o Meteosat, por citar algunos de los que el autor tiene conocimiento.

Del 2000 a la época actual

Lo que en los 90 parecía ser una prometedora escena electrónica fue apagando su ímpetu. Los que eran llamados a ser las grandes promesas de la electrónica fueron retrasando sus esperadas continuaciones (caso de Madelman) o simplemente dejaron de lado la experimentación y se pasaron al pop (caso de Silvania, que formaron el grupo de pop electrónico Ciëlo o del mismo Madelman que actualmente forma parte del dúo Chico y Chica). A pesar de todo lo negativo, también han surgido en este nuevo milenio bandas o han consolidado su posición otras que empezaron en los 90.

Podemos citar a los prometedores Every No One, banda valenciana que con un sonido próximo al trip hop ha creado una colección de interesantes canciones. Aunque el inglés es la principal lengua, algún que otro tema se canta en castellano, en el que bajo los sonidos electrónicos y el apoyo de guitarra y bajo, la sensual voz de Julia nos deleita los oidos. Lamentablemente poco se ha podido ver publicado hasta la fecha. Las últimas noticias de la banda nos vienen de su participación puntual en el festival Observatori 2004 y de un inminente directo en la sala valenciana Le Club.

En cuanto a Lethargy, una banda madrileña que combina tecno-pop, EBM, trip hop y otras influencias, únicamente en su primer álbum Escapa (2001) utilizan el castellano en un par de canciones: Escapa y Metropolis, adaptación del tema Sleepers in Metropolis de Anne Clark. Dentro de esa línea entre pop y techno oscuro, aunque más guitarreros, los también madrileños Stereoskop forman una banda con trabajos muy interesantes. A pesar de que el grueso de su producción es en inglés, también hay sitio para algún tema en castellano como Eléctrica, dentro de su álbum homónimo publicado en 2003 y el último hasta la fecha.

En estos últimos años, el revival de los años 80 y su sonido ha dado origen al estilo llamado electroclash, del que ahora algunos reniegan, y que también en nuestras tierras ha producido algunas bandas. Quizá no se quieran identificar con la etiqueta, pero a bandas como Dirty Princess, Chico y Chica, Alma X, Superputa o Focomelos, entre otros, les une una actitud provocativa (tanto en la escenificación como en sus letras) y unos sonidos retro o simplemente extraídos de algún aparato lo más cutre posible. En este caso el idioma castellano es fundamental para que se entienda completamente ese mensaje provocador que quieren transmitir. Algunos de estos artistas tienen discos publicados o se pueden encontrar en el recopilatorio Electrospain (2004) en el que aparecen temas como el singular Mami me he tragado el disco de Depeche Mode de Focomelos, Jugar al revés de Dirty Princess o Ultrapreñada de Insulina y las Poni Girls, por citar varios. En el apartado local no hay que olvidar a los singulares Gore Gore Gays, que con sus temas alegres, desenfadados y abiertamente gays hacen que cada directo suyo sea una experiencia muy divertida. Su único disco publicado Menage a trois (2003) contiene canciones como El tamaño sí importa o Todos los chicos están buenos.

El drum’n’bass es un estilo con un pequeño número de productores nacionales y, siendo ya pocos, aún son menos los que titulan o cantan estos temas en castellano. Apotheke Crew se apoyan en la voz del tristemente desparecido Frogg para construir 2 Slim Guitars, perteneciente a la recopilación Drum’n’Bass Iberian Shots (2004). Una bonita canción y que a fecha de hoy no ha sido publicada es Sin nubes de Huete & Marinetta, siendo ésta última la que aporta sus excelentes habilidades vocales. De momento se puede encontrar en el sampler del número 19 de la revista Trax.

A pesar de haber comentado que si bien en la actualidad no sean buenos tiempos para la electrónica, al menos al nivel de conseguir la repercusión que hubo en los 90, existe un grupo de irreductibles, así como nuevas promesas, que siguen manteniendo viva la llama de este modo de entender la música. Se ha hablando antes de pop electrónico o del drum’n’bass, pero también destacan artistas en estilos como el techno, el house, el minimal o la experimentación. Y, cómo no, hay también algunos que no dudan en utilizar el castellano para sus títulos.

Braille apareció en 2001 con el disco Día, mes año, en el que se pueden encontrar temas de electrónica polirrítmica y experimental con títulos como ¿Qué ha pasado?, Conversaciones, Otoño o Década. El posterior trabajo Partir (2004) tuvo que hacer su aparición en un sello francés. Además de continuar con la experimentación sonora, añade textos a temas como Presente, pero curiosamente la cantante utiliza el inglés. Otros temas que se incluyen en el mismo son Trapecio, Denso o Nudo.

Por otra parte, tenemos un gran disco de los catalanes Ferenc publicado este año por el prestigioso sello alemán Kompakt de título Fraximal. Entre los temas podemos citar algunos tan curiosos e imaginativos como Sandía, Fuet, Bocaseca 1.0, Vinagreta o Acidorro, que dan un toque desenfadado a las, en teoría, frías y calculadas composiciones.

Otro artista nacional que publica en sellos internacionales es Alex Under con Dispositivos de mi granja (Trapez, 2005), en el cual aparecen piezas de techno como Las bicicletas son para el verano, El arado adorado, El azadón es un cazador solitario o Balas de paja maja. Sus maxis publicados no se quedan atrás en cuanto a originalidad: Verde guisante, Sorberé cerebros o Las bicicletas son para el verano, entre otros.

El paso inverso. Extranjeros utilizando el castellano.

Aunque es algo más extraño puesto que el lenguaje internacional de facto de la música popular es el inglés, también se pueden citar algunos casos en que artistas extranjeros se han acercado a lenguas “exóticas”, como puede ser el castellano. Se enumerarán aquí algunos de esos particulares casos.

Uno de los más interesantes a la vez que curiosos es el de los inigualables Kraftwerk, que, tras haberse atrevido con el francés o el japonés y aunque en algunos temas como Numbers o Technopop se podía escuchar voces en castellano ("La música ideas portará / y siempre continuará / Sonido electrónico / Decibel sintético"), no fue hasta la versión del tema Sex Object cuando utilizan en mayor grado el idioma. El tema apareció en una versión española del álbum Electric Café de tirada muy limitada y a día de hoy inencontrable. La única forma de hacerse con esta curiosa rareza es a través de algún recopilatorio pirata o buceando por los procelosos mares del ciberespacio. La letra puede parecer un poco ñoña, pero se trata de una traducción más o menos literal de la versión original (ya sea inglés o alemán).

Otro caso es el del grupo Liaisons Dangereuses que lanzó en 1981 el tema Los niños del parque, aparecido como single y en el álbum homónimo del grupo. En dicho álbum también se puede encontrar el tema El macho y la nena, aunque sin duda el más conocido y bailado es el citado anteriormente. Poco más se ha sabido de ellos hasta la reedición de su album hace unos años.

El actualmente reconocido DJ y productor alemán Sven Väth, en los 80 formó parte de un grupo llamado Off, que publicó algún tema en el que se dejaba influenciar por la cultura latina. El más conocido es Electrica Salsa, pero también está La casa latina. Se trataba de un caso puntual, como el de Pet Shop Boys que en su álbum Bilingual (1996) incluyen el tema Discoteca. La mayoría de la letra es en inglés aunque también se atreven a cantar algún estribillo en castellano (“¿Hay una discoteca por aquí?” preguntan).

El grupo alemán de techno-pop Cetu Javu también se animó a utilizar una lengua distinta del omnipresente inglés, aunque en este caso seguramente fue la influencia del vocalista del grupo, el “español” Javier Revilla-Díez. A principios de los 90 tuvieron gran éxito con temas como A donde, Por qué, Dame tu mano o Una mujer.

En los primeros 90, en plena época de efervescencia rutera en nuestras tierras, algunos productores extranjeros también lanzaron algunos temas con títulos en castellano e incluso letras. Así tenemos al singular italiano de origen latino Ramírez con Orgásmico, El gallinero o Hablando, incluidos en su álbum Terapia (1993), los también italianos Atahualpa que en temas como Último Imperio o Luna de sangre combinaban la contundencia electrónica con la inclusión de sonidos étnicos sudamericanos; Steam System con Barraca Destroy o Terra W.A.N. con su curioso De puta madre, un repetitivo y explícito estribillo que no era del gusto de las radios comerciales por lo que se encargaron de “camuflarlo” con los famosos pitidos.

Dentro de la música más vanguardista también se puede citar algún caso, como Thievery Corporation que en su segundo álbum The Richest Man In Babylon (2002) incluyen el tema Exilio, toda una declaración en favor de aquellos que tienen que dejar su tierra en busca de una vida mejor. En su posterior trabajo The Cosmic Game (2005) siguen incluyendo un tema en castellano, Ambición eterna. Los alemanes Trüby Trio nombran algunas de sus canciones de house festivo con curiosos nombres como Carajillo, Jaleo o Alegre y los vieneses de Tosca incluyen una grabación radiofónica del parte franquista del final de la Guerra Civil española en su tema Buona Sarah (Opera, 1997).

En el caso del drum’n’bass, al ser un estilo principalmente inglés es más difícil encontrar piezas en otra lengua, pero se puede nombrar el excelente Al ritmo y con sol de Allied Force, incluido en el recopilatorio de Gorila Club Drum’n’Bass Iberian Shots (2004), demostrando que el drum’n’bass cantado en castellano puede ser muy interesante.

Como nota curiosa e inusual se encuentra el tema Vertigen de Recoil, el proyecto en solitario de Alan Wilder, antiguo componente de Depeche Mode. En él Rosa Torràs recita los versos en su lengua materna, en este caso el catalán. La pieza en cuestión surgió de un proyecto que se hizo en la página web del artista, en la cual solicitaba a los fans que enviaran textos recitados en su propia lengua. La persona seleccionada fue Rosa y el tema apareció en el último álbum publicado hasta la fecha: Liquid (2000).

Por último, podemos citar algunos artistas latinoamericanos, que también han dejado su huella utilizando el castellano al titular sus trabajos. Por una parte el artista de origen chileno Cristian Vogel con trabajos como Busca Invisibles (1999) en el que se incluye el tema General arrepiéntase o Rescate 137 (2000) que contiene temas como La isla Piscola o Esquina del sol. Por otra el también chileno Ricardo Villalobos que publica en 2003 el álbum Alcachofa. Y como colofón, citar la destacable versión que los mejicanos Caléxico hacen del Human de Goldfrapp, traduciendo la letra original al castellano.

por José María López Lagunas

octubre de 2005